Después de las dos últimas derrotas, el San Rafael estaba obligado a ganar esta jornada para no ver comprometida su clasificación y no ha fallado. El equipo de Vicente Román ha superado a un buen Santa Catalina gracias a su incombustible y solidario trabajo colectivo, pero también al acierto rematador de Raúl Juliá, que enseñó el camino del triunfo a su equipo con un doblete en el primer tiempo (m. 11 y m. 37). No obstante, al plantel rafeler, aún con clara ventaja a su favor, le tocó sufrir en la segunda mitad, donde los mallorquines, que recortaron diferencias en el marcador por mediación de Bibi en el 55, apretaron y generaron acciones de peligro que pusieron el miedo en el cuerpo a la afición blue. Pero el San Rafael, a base de casta y personalidad, supo salvaguardar su ventajosa renta para llevarse en encuentro vital de cara a sus aspiraciones de salvar la categoría. Destacar el debut como titular de Ndao, mediocentro cedido por el Ibiza. Ficha Técnica
4-0. ¡Maaambo!
Al CD Ibiza le ha sentado de maravilla la jornada de descanso. Y también a Ortiz, una de sus estrellas. No en vano, el equipo de Puma ha regresado a la competición con una contundente goleada al Manacor en un partido donde el delantero cordobés se ha marcado un doblete. Los deportivistas siguen dando pasos de gigante en su lucha por alcanzar los puestos de playoff y, a la espera de lo que haga esta tarde el Alcúdia, que juega en Inca ante el Constància, tiene la zona de promoción a sólo cuatro puntos.
El conjunto rojillo no ha encontrado excesivos problemas para superar a su oponente, aunque, eso sí, no ha sido hasta el minuto 24 cuando gracias a un gol de Pau Pomar pudo abrir la lata y encarrilar el encuentro. Hubo que esperar hasta la segunda mitad para que los ibicencos pusieran la puntilla merced a dos chicharros de Ortiz (m. 59 y m. 68) , a quien no le tiembla el pulso a la hora de definir. El atacante acumula ya 13 tantos en 24 partidos, siguiendo muy de cerca los registros de su compañero Terán, pichichi del campeonato con 18 golitos. Ahí es nada.
Y ya con todo el pescado vendido, Adrián Ramos no quiso ser menos y también marcó su gol (m. 88) para cerrar el marcador de un partido completo de los de Puma, que cada jornada que pasa están algo más cerca de las posiciones que dan derecho a jugar la liguilla de ascenso a Segunda División B. Destacar, el debut oficial del lateral canario Dailos y el estreno en Tercera del cadete Pere Mas, jugador del Insular que jugó con el CD Ibiza los últimos minutos con muy buenas sensaciones. Ficha Técnica
Las sinceras reflexiones de un presidente
V. R. / noudiari.es El presidente del Formentera, Xicu Ferrer, no cree que el partido de este domingo en Sant Francesc ante el líder, la Peña Deportiva de Santa Eulària (17 horas), represente el último tren de su equipo hacia el título, a pesar de que en este momento median diez puntos de diferencia entre un conjunto y otro en la clasificación de la Liga balear de Tercera División. “Hay que tener en cuenta que esta temporada hay 40 jornadas y después de este partido seguirán quedando 39 puntos en juego”.
La falta de gol ha sido en algunos partidos el talón de Aquilés del Formentera, y así lo piensa Ferrer. “Ha habido partidos en los que hemos sido superiores, como ante el Mallorca B sin ir muy lejos, y que no hemos ganado porque esta campaña nos está costando mucho materializar las ocasiones de gol que generamos. Y creo que de ahí viene principalmente la diferencia de puntos que existe en este momento con la Peña Deportiva, que está haciendo un muy buen trabajo de la mano de Raúl Casañ, buen conocedor de la categoría, como está demostrando”.
“Hemos reforzado la línea de ataque con la incorporación de Wadir sa Silva, pero hay que ser conscientes de que una sola persona no puede cambiar las cosas. Se trata de un trabajo de equipo que habrá que revertir entre todos. De todas formas, creemos que es un futbolista muy importante y que nos ayudará mucho de aquí final de temporada”, prosigue el presidente del club formenterense.
El título
Preguntado por si su equipo puede alcanzar a la Peña en la clasificación y luchar por el título de campeón, Ferrer se muestra prudentemente optimista. “No renunciamos a nada. Al menos hasta que las matemáticas digan lo contrario y el partido de este domingo es importante en este sentido, pero no decisivo. Aún queda mucha Liga. Ser primero es muy importante de cara al play off de ascenso, ya que puedes lograr el ascenso en una sola eliminatoria. En tres es más complicado y, además, la temporada se hace muy larga”.
El Formentera vivió la pasada campaña en Segunda B algunos de los momentos más brillantes de su historia como club. A pesar de no haber conseguido la permanencia, su papel en la Copa del Rey, donde eliminó a un Primera, al Athletic Club, le llevó a la primera plana informativa de los medios deportivos del país. Ferrer es consciente de que a la afición le gustaría que el equipo volviera a subir a Segunda B, aunque reconoce que lo que ocurrió en la competición copera es improbable que se repita en muchos años.
“Desde luego que a la gente de fútbol de la Isla le gustaría que el equipo regresara a la categoría de bronce del fútbol español y si los resultados deportivos nos empujan a ello, la gente de Formentera decidirá dónde quiere que esté su equipo. Eso sí, siempre con los pies en el suelo, aunque lo cierto es que el balance económico del paso del equipo por Segunda B fue positivo. De todas formas, hay que pensar que con la estructura con la que contamos, el lugar normal de este club es la Tercera División. Lo que no quiere decir que si los resultados deportivos nos conducen más arriba lo vayamos a descartar”.
La base, el futuro
Ferrer, como buen aficionado a este deporte, sabe que el aficionado “se acostumbra rápidamente a lo bueno”. “Estamos mal acostumbrados por lo que hemos vivido estos últimos años y ahora perder ante un equipo como el Mallorca B incluso nos parece un desastre. Entiendo a la afición porque soy del mismo parecer, pero tenemos que mirar las cosas con perspectiva. Este año hemos empezado a trabajar de forma seria con la base y es una de las cosas de las que más orgulloso estoy. Hay que ir dando pequeños pasos para crecer como club y creo que estamos sentando las bases del futuro del club, y eso también es muy importante, porque en un sitio pequeño como Formentera es complicado poder contar con entrenadores titulados en todas las categorías”.
El presidente del club opina que uno de los éxitos del equipo radica en el apoyo de la afición. “Desde que el equipo subió a Tercera División, e incluso desde antes, los aficionados han estado al lado del equipo. Se mantiene el número de gente que acude al campo los domingos, e incluso en algunas épocas la asistencia es superior. Igual es porque en invierno no hay muchas cosas que hacer en Formentera, pero lo cierto es que no falla”.
Sobre los comentarios de que el Formentera es uno de los clubes con mayor presupuesto de la Tercera División balear de fútbol, Ferrer insiste en que no es superior al de algunos de sus rivales. “Aquí nos conocemos todos. Hemos intentado fichar a futbolistas de equipos rivales y han declinado la posibilidad de venir a jugar aquí. Sabemos lo que gastan otros y no hay muchas diferencias. Nuestro presupuesto rondará los 500.000 euros, pero para todas las secciones del club. Y aquí se incluyen sueldos de futbolistas, entrenadores, alquileres… Estamos en la línea de los clubes de la parte de arriba de la clasificación”.ç
Igualdad
El presidente del Formentera no piensa que la Liga balear de Tercera División de este año sea más fuerte que la de otras campañas, pero si que ve una mayor igualdad entre los equipos que están en la zona de play-off y los que aspiran a una de estas plazas. “Veo una competición con un nivel más parejo que otros años. Hay muy pocas diferencias entre muchas plantillas y eso se nota en los resultados. El CD Ibiza, que ha subido este año, tiene muy buenos jugadores que todos conocemos y la Peña cuenta con una plantilla muy fuerte. La principal diferencia es que este año te puede ganar cualquiera”.
Preguntado por su experiencia como presidente del Formentera, Ferrer asegura que está siendo algo “muy bonito”. “Tanto por el hecho de jugar en Segunda B como por el papel del equipo en la Copa del Rey. Han sido tres años, pero han parecido ocho. Con aciertos y errores. Hay cosas que, desde luego, ahora no las haríamos como las hicimos en su momento. Quizá por falta de experiencia, pero de todo se aprende. De lo que estoy más contento es de la apuesta por la base que hemos hecho recientemente. Pero también de haber eliminado al Athletic Club en el Copa del Rey. Esto igual es irrepetible. Y queda grabado. El precio es caro en cuanto a lo que hipotecas en la vida personal, pero por cosas como esta, entre otras muchas, vale la pena por la satisfacción que te da”
“Es cierto que en este tiempo nos hemos equivocados en algunas cosas, como en el hecho de haber dejado ir a jugadores a mitad de temporada, como nos ocurrió cuando estábamos en Segunda B. Obramos de buena fe y quizá eso nos perjudicó. Miramos antes por otros que por nosotros mismos y eso, quizá, ahora no lo haríamos de la misma manera. Miraría más por nuestros intereses que no por los de terceros”.
“Qué cosas haría de otra manera, la manera de gestionar las bajas. En ese momento nos hubiera hecho falta una persona con experiencia, un profesional de esta materia. En nómina o que nos hubiera aconsejado desde fuera. No hay rencor hacia Tito García Sanjuán por haber dejado el equipo a mitad de temporada. Me llamó un día y me dijo que no aguantaba más y que se iba. Fue una decisión suya, única y exclusivamente. Dentro del campo era una persona muy profesional y preparada. Pero el rencor, en el fútbol, como en otras muchas cosas, no te lleva a ningún sitio”.
“El Ibiza no se come a nadie”
“Tienen un equipo muy potente; a algunos de sus jugadores los he tenido yo, como Chavero. Quieren meterse ahí arriba también y seguro que nos lo van a poner difícil pero no se comen a nadie. Nosotros respetamos a todos los rivales pero no le tenemos miedo a ninguno”. Son las palabras, recogidas por el digital huelvaya.es, del entrenador del Recreativo de Huelva, José María Salmerón, refiriéndose al conjunto de Andrés Palop en la previa del partido que ambos equipos disputan este domingo en el Nuevo Colombino. El entrenador recreativista, asimismo, ha dicho, respecto al buen ambiente que se vive en seno del club albiazul, que “notamos que en Huelva todo el mundo habla del Recre, y eso es buena señal. Ojalá el domingo en el estadio tengamos la mejor entrada de la temporada y consigamos los tres puntos pero tenemos que tener los pies en el suelo”.
“Los jugadores son conscientes de lo que nos estamos jugando y del buen momento en el que estamos. La confianza está siempre al máximo nivel y tenemos que competir como con cualquiera, tenemos que ser un equipo muy humilde”, ha indicado el míster del equipo más antiguo del fútbol español, que no ha dado ninguna pista acerca del once titular que saltará al verde para enfrentarse al Ibiza. “Se verá el domingo”, ha aseverado un José María Salmerón que, a pesar de la buena racha de resultados de su equipo, prefiere ser cauto. “No me preocupa ahora mismo, estaría preocupado si llegáramos así a la última jornada pero siempre me quedo con las sensaciones que estamos dando y estas son muy buenas. Hay tiempo suficiente para entrar en la pelea. Cada semana es un mundo”.
Desafío de héroes
El Ibiza afronta este domingo, en el Nuevo Colombino, uno de los partidos más trascendentes de la temporada. No en vano, tiene la oportunidad de recortar tres puntos al Recreativo de Huelva, que le precede en la tabla con cinco de ventaja. El equipo albiazul es quinto con 44 y está a sólo uno de los puestos de playoff, mientras que el plantel de Palop, sexto, tiene la liguilla a 7 dígitos, por lo que lograr la victoria es vital para los intereses del grupo celeste, que es muy consciente de lo mucho que hay en juego ante el Decano del fútbol español, la escuadra más en forma del panorama nacional en 2019 entre los equipos de Primera, Segunda y Segunda B. Y es que el Recre acumula una racha de seis partidos sin conocer la derrota, con 5 triunfos y un empate.
Andrés Palop, en rueda de prensa, ha avisado del potencial del bloque andaluz, pero tiene muy claro que si sus jugadores ofrecen su cara más competitiva tendrán muchas opciones de llevarse el gato al agua. “Si somos capaces de rendir a un gran nivel daríamos un golpe encima de la mesa bastante importante”, ha dicho el entrenador unionista, que también considera el partido ante el Recreativo de Huelva importante para revertir la irregular imagen que ha ofrecido su equipo fuera de casa en las últimas jornadas. La ambición, así pues, es máxima. “No vamos allí ni temerosos ni a tomar precauciones. Somos un grupo que podemos competir de tú a tú a los grandes del campeonato y los futbolistas saben que tienen que poner su mejor versión porque es la mejor manera de mantenernos vivos en las mejores posiciones”, ha afirmado el técnico.
También, el estratega ha señalado que el conjunto albiazul parte con ventaja en este atractivo enfrentamiento de gallos. “Jugamos un partido difícil, complicado y el Recre es favorito por el momento en el que llegan, por el ambiente que se va a crear, por la identidad del club y por su historia”, ha indicado el preparador valenciano, quien, pese a todo, ha apuntado que “nosotros vamos con muchísima humildad, con hambre y ganas de poder hacer un partido completo y competir de tú a tú”. Así las cosas, el conjunto ibicenco, que viaja con las bajas de Verdú y Fobi, pero con la disponibilidad de Gonzalo (se ha recuperado del fortuito golpe que sufrió con Rodado en el calentamiento del partido ante el Real Murcia), viaja a Huelva con la idea de arrancar un triunfo en un que le dé la vida de cara a acercarse a los puestos de playoff en un escenario donde se esperan unos 10.000 aficionados recreativistas.
Lucas: “Tenemos que competir al máximo nivel”
Mueren por vivir
Todo el mundo en Can Misses sueña con alcanzar el fútbol profesional. La Segunda División. La Liga 123. La LFP. Esa es la ambiciosa meta que, en la mente de todos los que rodean a la UD Ibiza, jugadores, directivos, entrenadores y aficionados, ocupa sus pensamientos. Pero hay un grupo de chicos que, con el mismo escudo en el pecho, ahora mismo tienen otro objetivo entre ceja y ceja, mucho menos ambicioso pero, a día de hoy, igual o más complicado: la permanencia en la Liga Nacional Juvenil.
Jordi Riera es el entrenador del Juvenil de la UD Ibiza, un equipo que rema contra corriente para evitar lo que parece inevitable ahora mismo. El equipo marcha penúltimo con 16 puntos, a 10 de la salvación, que ahora mismo marca el Ferriolense, cuando tan sólo le quedan 11 partidos por disputar: “Nuestra valoración, hasta ahora, obviamente no puede ser buena. Estamos en una situación complicada. Lejos de la salvación y con una plantilla que ha quedado coja”. La UD Ibiza ha tenido muchas bajas a lo largo de esta temporada. Los últimos en bajarse del barco han sido Justo, Sergi, Gavilán, Carles y Ángel. “Hemos tenido bajas importantes. La semana de trabajo es rara, con pocos jugadores, tenemos que subir chavales del cadete para poder hacer entrenos con un mínimo de calidad”, asegura un Riera algo decepcionado con el panorama que le ha quedado.
“Aún así, creo que el equipo está compitiendo bien en la segunda vuelta. El equipo está sacando fuerzas, está peleando, los que quedan se han juntado, han hecho un grupo pequeño pero muy comprometido. Solo puedo elogiar a los chicos que están luchando por salvarse. Hemos intentado fichar, pero tampoco los otros clubes nos han facilitado las salidas de sus futbolistas”. La plantilla ha quedado, además, más mermada si cabe por las lesiones de Antonio Arellano, Iker y Kike.
El joven míster de la UD Ibiza es un técnico de la “escuela Cruyff”. Vocación ofensiva, presión alta y posesión. Ingredientes que, de momento, no han dado el resultado esperado en cuanto a puntos: “Creo que nos ha faltado también una pizca de fortuna. El equipo ha merecido más puntos de los que tiene. El equipo tiene personalidad, sale a dominar, a mandar, pero esto se ha visto poco recompensado en cuanto a resultados”. Riera saca pecho en cuanto a la filosofía que la UD Ibiza quiere impregnar a su fútbol base: “El jugador del Ibiza tiene que estar preparado para hacer cosas grandes, no concibo meterme atrás y salir a la contra. Seguro que hemos perdido algún punto por este exceso de valentía, pero es la forma de jugar que la UD quiere para todas sus categorías y nosotros debemos ser el referente”. La ideología futbolística celeste queda clara.
El principal inconveniente que se ha encontrado Riera esta temporada han sido la marcha de futbolistas clave, que han dejado el equipo cojo. El míster tiene claro que no es casualidad que esto ocurra de manera tan habitual en la isla. Encuentra los motivos, y aprovecha para lanzar una reflexión interesante: “Ibiza tiene jugadores, tiene materia prima. Pero tenemos un déficit competitivo importante. A nosotros, por ejemplo, nos ha penalizado no saber gestionar situaciones de estrés. No es normal que un equipo de Nacional sufra tantas bajas a mitad de temporada porque los futbolistas decidan dejarlo. Por rendirse. Los jugadores de Ibiza, los que son buenos, están acostumbrados a ganar siempre (en las competiciones de la isla). Y en el fútbol de verdad no se gana siempre. Huir de una situación de estrés, de que las cosas no me salgan bien y rendirme a la primera no es positivo”. Esto, para Riera, es uno de los motivos por los que no surgen de Ibiza futbolistas de élite: “Es por esto que a los jugadores de Ibiza les cuesta llegar. La respuesta está más abajo, en infantiles, en cadetes, en alevines. Los niños de Ibiza que tienen calidad compiten poco, dos o tres partidos al año. Estar habituado a que siempre me salen las cosas bien hace que luego, cuando no ganas, no lo sabes gestionar. Es importante que el jugador aprenda a perder. Aceptar que hay veces que se pierde y el lunes hay que volver con el mismo hambre, con las mismas ganas”.
Riera tiene claro que, pese a todos estos inconvenientes, el barco todavía está a tiempo de salir a flote. Son los que están y son los que tienen que intentar evitar un descenso al que el equipo parece abocado. “Yo solo quiero tener once jugadores con compromiso, once jugadores que salten al campo y quieran estar aquí. Ahora pensamos partido a partido, día a día. Nosotros iremos al campo del Atlético Rafal a competir y a intentar ganar. No nos vamos a rendir. Ojalá consigamos la permanencia, y si no la conseguimos, que la UD Ibiza vuelva cuanto antes porque es en Nacional donde debe estar”.
Más claro que el agua
Tras una tempestuosa temporada en División de Honor, este año han llegado aires de calma al municipal de la Villa del Río en cuanto a su escuadra juvenil se refiere. La Peña Deportiva de Edu Amoedo, pese a ser un descendido de la máxima categoría, sabía desde el principio de sus limitaciones y el objetivo siempre estuvo claro: la permanencia. Y en ello están. A falta de 12 jornadas para acabar el curso, el bloque peñista marcha décimo en la tabla con 31 puntos, 6 más que el Manacor B, cuarto por la cola y equipo que marca ahora mismo el descenso a Preferente.
“La temporada está siendo mejor de lo que esperábamos”. Así de contundente se muestra el técnico blanco, que se estrena esta temporada en el cargo tras sustituir a Raúl Casañ. “Desde el primer momento nuestro objetivo ha sido no bajar a Preferente. A día de hoy estamos cerca de conseguir la salvación de manera virtual, que estaría entre los 37 y los 40 puntos. Estamos contentos. Ahora toca rematar la faena y respirar tranquilos”, valora un Edu Amoedo que no tiene ningún reparo en desgranar todo lo que rodea a su equipo y al universo del fútbol juvenil.
“Formar el equipo no fue fácil. No quedó ni un solo jugador de División de Honor y tuvimos que formar un bloque desde cero, buscar jugadores fuera del club. Nos encontramos un grupo muy heterogéneo, con juveniles de primer, segundo y tercer año. Gente de Vila, de Sant Antoni, de Santa Eulària. Chavales con motivaciones diferentes. Todo esto añade dificultades extra”. Además, el hecho de que Edu Amoedo era un recién llegado añadió más dificultades: “Ni yo conocía a los jugadores ni los jugadores me conocían a mí. Eso sí, rápidamente se formó un buen equipo, un buen vestuario. Queríamos buenos chavales, y los conseguimos. En ese sentido estamos muy contentos”.
El míster de la Villa del Río se aleja del tópico en el que algunos caen al hablar del escaso nivel del fútbol juvenil balear: “Lo mejor, como entrenador, es la competitividad que percibo en la Nacional. Aunque el nivel quizá no sea el mismo que se pueda encontrar en otros grupos de la misma categoría, como en Cataluña o en Madrid, sí se da que los equipos están muy equilibrados, y ningún partido se da por ganado o por perdido. Eso se contagia a los futbolistas, y mi equipo compite generalmente contra cualquiera, ya sea el Mallorca B, el Atlético Baleares o el colista. Me quedo con eso, con la competitividad, tanto en la categoría como la de mi equipo”.
Eso sí, el grupo balear tiene un condicionante de sobras conocido: los viajes interislas, que afectan sobremanera a los conjuntos pitiusos. “Cada quince días tenemos que coger un avión. Además, para ir a Menorca, tenemos que coger dos vuelos. Eso, a los equipos mallorquines no les pasa, que van a la mayoría de partidos en autocar”. A colación de los desplazamientos, Edu Amoedo aprovecha para poner sobre la mesa otro punto que aleja a los suyos de la perfección: “Por poner otro pero, los jugadores, en esta categoría, ya empiezan a tener otras prioridades. De alguna manera, al futbolista de esta edad le puede bajar la motivación. El hecho de viajar cada dos semanas contribuye a esa caída de ilusión. Desgraciadamente, a esta edad, cada vez más, a los chavales les da pereza competir. Prefieren quedarse en Ibiza, estar con los amigos, jugar su partido y no tener que moverse de casa. Eso me entristece. Cuando yo era juvenil, hace unos 10 o 12 años, tengo la sensación de que no era así, nos matábamos por competir”.
La capacidad de un futbolista adolescente para competir a esa edad no es el único pero que se encuentra Amoedo en su día a día. El trabajo es bueno, pero, dice, “se podría mirar más arriba”. “Estamos en mitad de tabla y ya hemos jugado contra los equipos de la parte alta. Las sensaciones son buenas en ese sentido. Pero es verdad que, haciendo autocrítica, nos falta un puntito, una marcha más, para poder estar más arriba, peleando por subir a División de Honor”. La máxima categoría juvenil no cuenta ahora mismo con ningún representante pitiuso, tras el efímero paso peñista la temporada pasada. “Lo veo complicado, ya no sólo para nosotros, sino para cualquier equipo de la isla. A nosotros nos falta un punto más para ser un equipo que esté siempre en la zona alta, que pueda pelear arriba. Este año posiblemente nos salvemos, pero nadie te asegura que el año que viene no desciendas. Creo que, como club, deberíamos dar un paso más. Pensar en que quedar quinto es mejor que quedar cuarto, y no estar mirando para abajo”.
Edu Amoedo tiene claro qué hay que buscar en el horizonte: “ A corto plazo, salvarnos lo antes posible. A medio plazo, formar a los jugadores que tenemos en el B intentando darles minutos ya esta temporada. Y, sobretodo, tengo un objetivo a nivel personal, como entrenador. Hacer ver a todas las personas de mi entorno la importancia que tiene la formación, el fútbol base. Y lo digo para todos en la isla. Creo que en nuestro club hemos dado pasos grandes, pero debería hacerse en todos los clubes de Ibiza, apostar decididamente por la formación y no por ganar trofeos”.
Ibiza es una isla limitada en su población, y Amoedo es consciente de esa problemática particular. Pero insiste en una palabra, en un concepto: la formación. “El hecho de tener dos equipos en Nacional (la propia Peña y la UD Ibiza) para los jugadores es importantísimo, cada año juegan unos 50 futbolistas en la categoría, que están más preparados para dar el salto a Tercera. Pero no es fácil aquí. La mayoría de los jugadores de tercer año se marchan a estudiar fuera. Eso limita mucho a la hora de fichar. Luego, Ibiza es una isla pequeña, y no todos los jugadores son aptos para jugar en la categoría, igual que todos los jugadores que salen de juveniles no son aptos para jugar en Tercera. El número de jugadores aptos en Ibiza es limitado, es suficiente para tener, como tenemos, uno o dos equipos en la categoría, pero no más”. Contundente aseveración de un gran conocedor del fútbol a esa edad.
El míster de la Villa del Río no se corta un pelo al hacer una crítica, constructiva, eso sí, hacia su propio gremio. “Hay muy pocos clubes en la isla que se centren en la formación, solo piensan en ganar copas que luego cogen polvo en las vitrinas. Los entrenadores debemos hacer autocrítica. ¿Realmente estamos ayudando a los jugadores con lo que les transmitimos? ¿O queremos poner nuestro ego por delante del bien del futbolista y ganar una Liga más o una Copa más? A día de hoy, aún hay bastantes entrenadores que hacen lo segundo”. Además, Amoedo envidia la manera de trabajar de escuelas como la menorquina: “Hablas con gente de otros sitios, por ejemplo en Menorca, y realmente han apostado por la formación, han cambiado el chip. A lo mejor por eso allí tienen cuatro equipos de nacional y aquí dos”.
La conversación pone entonces el foco en el fútbol profesional y semiprofesional de la isla: “Entre los cuatro equipos de Ibiza (el caso del Formentera lo desconozco algo más) de Segunda B y Tercera… ¿cuántos jugadores hay en sus plantillas formados en el fútbol base de la isla? Muy pocos. No digo que esté mal fichar de fuera, pero esto denota que no estamos haciendo bien nuestro trabajo. Si queremos algún día ver a nuestros chicos en tercera, si queremos tener un equipo en División de Honor, tenemos que cambiar todos el chip. Primero, los entrenadores; segundo, los futbolistas”. El mensaje es claro.
En Santa Eulària hace años que el club ha hecho de su fútbol base una de sus banderas. “Al club no le podemos exigir más, siempre y cuando el objetivo sea la permanencia. Pero si queremos volver a División de Honor algún día, habría que darle una vuelta más. Por ejemplo, a nivel de cuerpo técnico. Aquí somos dos personas que hacemos todo, en otros clubes, ya no el Mallorca, si no otros que van arriba más humildes, tienen más personal que abarca más responsabilidades”. En cuanto a las instalaciones municipales que usufructa el club, el míster peñista se muestra encantado. “Tenemos 4 días de entrenamiento, con el campo entero. Vestuario para nosotros, una persona que se encarga de nuestra ropa. Un gimnasio, dos fisioterapeutas que trata a los chicos. En ese sentido, no podemos quejarnos, el entorno que tiene el futbolista juvenil en la Peña es difícilmente mejorable”.
Interesantes reflexiones de un auténtico “enfermo” del balón, metódico y amante del fútbol en sus categorías de formación. Antes de acabar, Amoedo deja también una pequeña crítica para la prensa pitiusa. “No es necesario escribir diez veces sobre nosotros, entiendo que hay otros deportes que ni tan siquiera aparecen en los medios. Pero al menos, la vez que aparecemos, la información debería estar contrastada. Digo esto porque muchas veces lees la prensa y la información que aparece de nosotros es errónea. Los puntos que llevamos, la posición que ocupamos, el día que jugamos. Demasiados errores que deberían corregirse”. Anotado queda.
10.000 almas en contra del Ibiza
El Ibiza juega este domingo un partido que grabará a fuego en sus memorias, ya que se mide al equipo más antiguo del fútbol español, el Recreativo de Huelva, en un escenario con solera, el Nuevo Colombino. El conjunto de Andrés Palop busca acercarse aún más a los puestos de playoff (se encuentra a 7 puntos), por lo que ganar al Recre, que precede a los celestes en la tabla con 6 dígitos de ventaja, se antoja vital si no quiere alejarse del tren de cabeza.
Los ibicencos llegan a la cita onubense con la moral por las nubes tras la victoria de calidad que consiguió frente al Real Murcia la pasada jornada en Can Misses (3-2), pero el conjunto de José María Salmerón también encara el encuentro con sobredosis de confianza después de golear al UCAM Murcia a domicilio (1-5). Además, los albiazules acumulan una intachable racha de juego y resultados, encadenando 8 partidos sin conocer la derrota, con seis triunfos y dos empates.
El ambiente que se respira en Huelva en inmejorable. Con el club estabilizado en lo económico y con la dulce trayectoria deportiva por la que atraviesa el equipo en estos momentos, se ha desatado una ‘Recremanía’ entre la afición, que está tremendamente ilusionada y sueña con el ascenso de categoría. La hinchada albiazul está respondiendo a la llamada del Recreativo y, para este domingo, la entidad espera que las gradas del Nuevo Colombino alberguen a más de 10.000 espectadores, lo que supondría la mejor entrada de la temporada para un estadio con con 21.670 asientos.
“Afortunadamente se está viendo la luz en el final del túnel, después de tanto sufrimiento y de tantos años de plomo. En lo económico el Recreativo se ha estabilizado y en lo deportivo el equipo lleva una racha importante de victorias, y nos mantiene ese sueño de terminar la temporada entre los cuatro primeros. Y se ha desatado la locura, la ‘Recremanía’. Ahora todos quieren venir a ver el Recreativo y todos los niños quieren hacer el pasillo al Decano del fútbol español”, dijo recientemente a Cope Huelva José Antonio Cabrera, presidente de la Federación de Peñas del Recreativo, declaraciones que fueron recogidas por el digital albiazules.es.
“Desde esta Federación de Peñas hacemos el llamamiento para que todos aquellos recreativistas de Huelva capital y provincia que no sean socios, que vengan a ver el partido. Hay precios de todo tipo, precios muy económicos. Tenemos que ser los abonados los que convenzamos a amigos y familiares para que vengan este domingo por la mañana. Es un partido para no perdérselo. Ahora toca disfrutar, aunque no sepamos cómo terminará la temporada. Pero ya nos toca”, afirmó Cabrera.
Así las cosas, el Ibiza no va a encontrar un ambiente placentero en el Nuevo Colombino, pero los jugadores de Palop no se amedrantarán y ni, por su puesto, sufrirán miedo escénico este domingo. Los celestes saben muy bien lo mucho que se juegan ante el Recre y se han conjurado para sumar los tres puntos que les permitan recortar distancias con un rival directo en su lucha por meterse entre los cuatro primeros clasificados. En el seno de equipo no se piensa en otro resultado que no sea la victoria y a por ella irá el plante desde el primer minuto.
De Copas en Ibiza
Hace poco más de un año, los aficionados pitiusos vivieron uno de los episodios más exitosos de la historia de nuestro fútbol. El Formentera, un recién llegado a la Segunda B y al imaginario popular del balompié español, se deshacía del Athletic Club de Bilbao en dieciseisavos de final de la Copa del Rey. Lo hizo, ni más ni menos, que ganando en San Mamés con el histórico gol de Álvaro Muñiz. Semanas después, ya en octavos, no pudo seguir con el sueño y cayó con el Alavés de Abelardo en octavos. Esta temporada, desgraciadamente, no ha habido representación pitiusa en el torneo del K.O., pero para la próxima edición el Ibiza quiere dar mucha guerra e intentar repetir la hazaña formenterense.
Son muchos los seguidores que se preguntan exactamente qué equipos se clasifican para la Copa del Rey de Segunda B. En este punto el reglamento es algo complejo, pero claro. Se ganan la plaza los cinco primeros de cada grupo, exceptuando los filiales. Esto es, en el Grupo I, por ejemplo, el Atlético de Madrid B es ahora mismo segundo y el Real Madrid Castilla marcha en quinta posición. Así pues, sus billetes coperos pasarían al sexto y al séptimo clasificado, ahora mismo la Cultural Leonesa y el Pontevedra. En el caso del Grupo del Ibiza, el IV, a día de hoy no hay ningún filial entre los cinco primeros y es poco probable que ninguno llegue ya a posiciones tan altas. Pero ahora mismo el bloque de Palop es 6º, así que la “vía clasificación” no le daría para meterse.
Pero aún hay cinco billetes más para la Copa. Estos irían a parar a los cinco equipos, de entre todos los grupos, que más puntos sumen al final de la liga y que no hayan acabado entre los cinco primeros. Prima el puntaje y no la posición en la clasificación. Es decir, podría darse la circunstancia que se clasificara hasta el 10º clasificado del grupo IV, por ejemplo, si éste suma más puntos que el sexto del resto de grupos.
Es ahí donde el Ibiza, ahora mismo, tiene las de ganar. A día de hoy, los sky blue son sextos de su grupo con 38 puntos, unos guarismos que los convierten en el equipo con más puntos de entre los que no ganarían el billete por su clasificación. Por detrás de ellos, tras haberse disputado 24 jornadas, andarían la Balompédica Linense, con 37, el Coruxo gallego, con 36, el Badajoz, también con 36, y Langreo, Sanse y Murcia, con 35.
Si la buena marcha del conjunto que dirige Palop continúa, estará en el bombo de la primera ronda copera, allá por septiembre. En el horizonte, tres eliminatorias después, un choque ante un Primera División. ¿Se imaginan un UD Ibiza – Real Madrid? ¿O los celestes visitando el Camp Nou? ¿ O a Amadeo Salvo volviendo al palco de Mestalla como visitante?
De clasificarse para la Copa tras disputar la Segunda B, sería un hecho histórico. A las puertas se quedó la UD Ibiza la temporada 2007-2008, cuando entrenada por Luis Elcacho acabó séptima y se quedó con la miel en los labios.
La Peña, la vía pitiusa más factible
Pero no todas las esperanzas coperas para el próximo año pasan por el Ibiza. De hecho, quién ahora mismo parece más cerca de lograr el objetivo es la Peña Deportiva, que podría lograr el billete desde Tercera, donde se clasifican únicamente los campeones de cada grupo, independientemente de si luego consiguen el ascenso o no. Los de Raúl Casañ dominan con mano de hierro el grupo balear y, de seguir así y hacerse con el campeonato, entrarían también en el bombo. Sería sin duda histórico para la isla juntar en la misma temporada dos equipos en la Copa. Y si la Peña flojea, por ahí asoma el Formentera, tercero, amenazando el liderato. Además, el segundo, el Mallorca B, no puede jugarla porque el primer equipo bermellón tiene billete asegurado al disputar esta temporada la Liga123. Así que muy mal debería darse para que un equipo pitiuso de Tercera no meta la cabeza en una competición tan bonita como la Copa. Agárrense, porque la temporada que viene vienen curvas. Y vienen los miércoles.
El Ibiza no pone el autobús, se sube
Suele decirse en fútbol cuando un rival plantea una estrategia ultradefensiva que pone el autobús. Desde luego, no es el estilo del Ibiza esta forma de afrontar los partidos, así que en lugar de plantarlo lo que va a hacer es subirse a él. Y es que dentro de pocas fechas, el club que preside Amadeo Salvo, como tienen muchos equipos, tendrá su propio autocar oficial después del acuerdo de colaboración al que ha llegado con la empresa ibicenca Dipesa Group, relación que mantendrá unidas a las dos compañías hasta la temporada 2020-2021.
“Tanto la UD Ibiza como Dipesa Group se muestran muy satisfechos por el acuerdo de colaboración. Ambas entidades realizarán acciones conjuntas con el objetivo de dar a conocer su vinculación. Para la UD Ibiza es muy importante sumar a nuestro proyecto una empresa líder y referencia de su sector en la isla de Ibiza”, puede leerse en el comunicado hecho público. “Dipesa se encargará tanto de todos los traslados del primer equipo, así como al de los actos oficiales del club. Además, en próximas fechas será presentado el autobús oficial del club”, añade la nota de prensa.