No hacía falta sol. Bastó con un trazado afilado, piernas preparadas para el castigo y unas cuantas ganas de liarla en serio. Este domingo, Port Sant Miquel no fue ni para bañistas ni para selfies: fue para corredores de los que no se asustan ni con cuestas, ni con cielos plomizos. La élite del trail español se plantó en el norte de Ibiza y lo dio todo. Resultado: título nacional para María Fuentes y Andreu Blanes, y una jornada que, pese al gris del cielo, terminó brillando por intensidad.
María no dejó lugar a la duda. Desde el kilómetro cuatro ya iba por delante, sin necesidad de mirar atrás. Mientras el grupo se peleaba por no descolgarse demasiado, ella simplemente fue sumando metros y minutos. Al final, casi seis de ventaja sobre la segunda. Autoritaria, sí, pero sin sobreactuar. Solo ritmo, cabeza y piernas. Mucha pierna.
En la carrera masculina, Blanes tuvo que medir más. Le apretaron por detrás, especialmente los catalanes Torrella y Corbera, que no estaban allí para hacer turismo. Durante buena parte del recorrido iban tan cerca que podían escucharle la respiración. Pero en los tramos donde la cosa se complicaba de verdad, Blanes fue mejor. Se despegó, metió tiempo y cruzó la meta con la tranquilidad de quien sabe que lo ha hecho bien.
Las categorías sub-23 y Promoción también tuvieron su historia. Núria Llansó y Alejandro Garrido se llevaron el oro entre los más jóvenes en los 13 kilómetros, con finales apretados y ritmos nada infantiles. Y en los 7 kilómetros, para quienes empiezan a dejar de ser promesas para convertirse en realidades, Candela Pérez (17 años y sin complejos) y Yeray Hernández firmaron tiempos que podrían haber metido miedo incluso en las pruebas largas.
Por equipos, Cataluña arrasó. Lo suyo empieza a ser costumbre: tres oros, dominio sólido y una plantilla que combina calidad y profundidad como pocas. Eso sí, la Comunidad Valenciana se fue con la sonrisa de quienes se llevaron los títulos individuales más importantes.
Ah, y como extra: los campeones se han ganado la plaza para el Mundial de Canfranc. Será en septiembre, en casa, y con ganas de demostrar que lo que se vio en Ibiza no fue casualidad.
Así que nada, el Campeonato de España de Trail Running se despide de la isla con zapatillas sucias, piernas cargadas y mucho nivel. Que no hubiera sol, daba igual. El espectáculo venía por otro lado.