Tras la victoria de la UD Ibiza en su primer partido de la temporada, Pep Lluís Martí se mostró satisfecho con el rendimiento de su equipo y destacó la importancia de haber conseguido los tres puntos. Martí enfatizó que el objetivo del club es terminar la temporada lo más arriba posible, demostrando una clara ambición para este nuevo ciclo.
El entrenador valoró el esfuerzo del grupo, resaltando la fuerte unión y la familia que se ha creado dentro del vestuario. Este sentido de cohesión, según Martí, será fundamental para afrontar los desafíos de la temporada.
Martí también reconoció y agradeció el apoyo de la afición, que se desplazó en gran número para alentar al equipo en Madrid. El técnico subrayó la importancia de este respaldo, que fortalece la conexión entre el equipo y sus seguidores, creando un ambiente positivo y motivador tanto dentro como fuera del campo.
Con la primera victoria en el bolsillo, Martí expresó su satisfacción y la del grupo, señalando que comenzar con tres puntos es un impulso crucial para mantener el enfoque y la intensidad en los próximos encuentros.