diariodeibiza.es El Sant Rafel tendrá un debut de cuidado mañana en casa frente al que será el principal favorito a ganar la Liga, el Mallorca B, que descendió la pasada campaña de Segunda B y que está dispuesto la próxima temporada a regresar a la categoría de bronce.
Pep Alomar, mano derecha de Lorenzo Serra Ferrer –actual presidente en funciones del Mallorca– en los distintos equipos que entrenó, es el nuevo técnico del filial mallorquinista y reconoció que espera un campeonato muy igualado: «Esta Liga será muy competitiva, con equipos que han hecho plantillas bastante equilibradas. Hay una combinación entre jugadores jóvenes y experimentados en Tercera».
Alomar tiene buenas referencias del Sant Rafel, su primer rival en el debut: «Sé que tiene un entrenador que trabaja bastante y que tiene las ideas muy claras. Creo que tiene un equipo bastante compensado en todas sus líneas. Dispone de jugadores experimentados en esta categoría y también sé que tienen gente joven que van pidiendo paso. Tengo entendido que pueden tener un par de bajas, aunque no lo sé seguro, pero está claro que nos darán mucha guerra».
El técnico del filial mallorquinista destacó los rivales más fuertes para la próxima temporada: «La Peña Deportiva será un conjunto competitivo, al igual que el Poblense, que se ha reforzado bien. También vi al Binissalem el otro día y puede estar ahí. Estará la competición muy abierta».
Pep Alomar no se siente presionado por tener su el cartel de favorito en la Liga: «Tenemos un equipo con jugadores jóvenes porque el 70 por ciento de la plantilla son futbolistas que proceden del equipo de División de Honor de juveniles, además de contar con jugadores que han estado cedidos en algún club de Tercera. Todos ellos irán a dar el máximo en cada partido. Hay una media de edad de casi 17 años. Vamos a tratar de adaptarnos lo antes posible a esta categoría e ir progresando día a día».
Dos objetivos marcados
Alomar reconoció que tiene dos objetivos claros en esta campaña que arranca: «Lo más importante es entrenar con una buena estructura y que los jugadores crezcan futbolísticamente y que en un corto plazo puedan subir al primer equipo. Otra de las metas primordiales es regresar a Segunda B, que es un importante escalón para los jugadores en su última etapa formativa».
El técnico de Sa Pobla explicó la filosofía de juego que quiere: «Está basado como en cualquier otro equipo profesional que tiene un filial. Hay que buscar una serie de pautas de juego, de ataques posicionales, de combinar el ataque corto con el largo, o jugar con circulaciones rápidas de balón, teniendo en cuenta la buena calidad de los jugadores con los que cuentas. De todas formas, todo dependerá del rival que tengas enfrente y las situaciones que te plantee».
El responsable técnico del Mallorca B resaltó que el nivel de exigencia será mayor la próxima campaña: «Los dos primeros equipos estamos obligados a lograr el ascenso y recuperar las categorías perdidas, por lo que la exigencia será máxima».