Cuando más enquistado estaba el encuentro que jugaron ayer la Penya Blanc i Blava juvenil y el Atlético Jesús de regional en el primer test serio de los rojiblancos esta pretemporada apareció José Oliva, que ingresó en el terreno de juego en el 65 y marcó el 0-1 para rescatar a los de Mariano Díez, sin pólvora hasta la aparición del malagueño. El goleador, tras una jugada colectiva, controló dentro del área y no perdonó ante el portero local. Después, en el 75, llegó el 0-2, obra de Óscar, que batió al guardameta por alto tras un disparo fuera del área. El próximo sábado, a las 21:00 horas, el grupo de Mariano Díez rinde visita al San José de Julio García. En Jesús, la vida sigue igual.