La Penya Independent, además de presumir del excelente rendimiento que está ofreciendo en su histórico debut en el fútbol nacional, también puede hacerlo por ser uno de los tres equipos del conjunto del país que aún no sabe lo que es recibir ningún gol a estas alturas del campeonato, junto con el Burgos, de LaLiga SmartBank y el Guijuelo, del Grupo 1 de Segunda RFEF.
De los 18 grupos de Tercera RFEF, donde juega el plantel que entrena brillantemente Mario Ormaechea, es decir, de un total de 288 plantillas, los de Sant Miquel de Balansat, del Grupo 11, son el rival que aún no saben lo que es recoger el balón del fondo de la red de su portería después de 5 jornadas de juego, con una diferencia de 6 goles, los que lleva marcados hasta ahora.
El Burgos, quinto clasificado de Segunda División con 15 puntos después de 9 fechas disputadas, es el equipo de mayor categoría que no ha encajado. La escuadra burgalesa únicamente acumula 5 tantos a favor, pero está sacando un rendimiento brutal a cada uno de esos chicharros. No en vano, ostenta puestos de playoff en un comienzo de liga espectacular.
El Guijuelo, por su parte, es el último rival que no ha recibido gol alguno en lo que llevamos de competición. El equipo guijuelense ocupa la segunda posición con 14 puntos después de nueve fechas celebradas en el Grupo 1 de Segunda RFEF. Ha marcado únicamente cuatro tantos, pero su brutal capacidad defensiva le está permitiendo pelear en la parte alta de la clasificación para alegría de sus aficionados.
Bien en cierto que la Penya Independent lleva tan sólo cinco partidos disputados, uno menos que el Guijuelo y cuatro menos que el Burgos, pero esta circunstancia no resta méritos al gran trabajo desarrollado por el plantel anaranjado sobre el terreno de juego, sobre todo en tareas defensivas, en el que el grupo de Mario Ormaechea se muestra como un bloque granítico, sin fisuras por donde penetrar sus adversarios en busca de su portería.
Sin ir más lejos, la pasada jornada, en el campo del Platges de Calvià, la Penya Independent jugó 15 minutos con un futbolista menos tras la expulsión por roja directa de Bilal y el cuadro mallorquín, en superioridad, no encontró el modo de meterle mano al bloque del norte de la isla pitiusa. Ahí es nada.
En Sant Miquel están de enhorabuena con la sobresaliente dinámica de resultados de la Penya Independent. Más no se le puede pedir a un equipo aguerrido que de la mano de Mario Ormaechea está protagonizando un comienzo de campeonato espectacular después de cinco jornadas, en las que comparte liderato, con 11 puntos, junto con el Santanyí, que, por contra, ha recibido 6 goles.
De traca.