Víctor M. Victoria Ibiza y Formentera se preparan para encumbrar este fin de semana al nuevo campeón de la Copa Interpueblos, que enfrentará a los dos vencedores de grupo, Sant Jordi y Penya Independent, en un duelo de altos vuelos y máxima igualdad. El campo de fútbol de Sant Rafel acogerá el domingo, a partir de las 17 horas, la final prevista y pronosticada por casi todos antes del comienzo de la competición. Las quinielas de los entendidos en la categoría apostaban por ambos como rivales a batir y los dos han trazado trayectorias tan idénticas como casi inmaculadas: cuatro victorias y un empate en cinco partidos. La emoción, por tanto, parece asegurada.
Fútbol Pitiuso ha entrevistado en el día más terrorífico del año, por Halloween, a los técnicos de ambos equipos y a cuatro jugadores para hablar de la esperada final, de las sensaciones con las que afrontan el decisivo partido y, además, de la situación actual del fútbol regional pitiuso, que vive tiempos de cambio. Hasta cuatro de los contendientes (Inter Ibiza y Peña Deportiva B, junto a los dos finalistas), han tenido opciones de alcanzar la final en la última jornada. Más participantes en liza y mayor igualdad entre ellos para poner en valor un producto que cotiza al alza, como se pudo apreciar en las abarrotadas gradas del Kiko Serra el pasado sábado.
Y es que el Sant Jordi rezuma optimismo en los últimos tiempos. La trabajada final coincide con el reciente cumplimiento de los 70 años de historia del club y tal efeméride es motivo suficiente para generar una corriente de ilusión en la entidad verdinegra. “Por supuesto, nos motiva muchísimo ganar por primera vez la Copa después de setenta años de vida”, reconoce su técnico, Rafa Payán.
El preparador jordier admite después que “se está despertando un sentimiento de pertenencia muy bonito en la entidad. Queremos regalarle por primera vez la Copa a la afición y a la junta directiva, por quien nos sentimos arropados. Hemos hecho una buena clasificación y nos merecemos jugar la final”.
Dicha final llega producto, en parte, del buen hacer del defensa David Sunder. Su milagroso pie evitó sobre la línea de gol que un remate del peñista Víctor Tur, en el tiempo de descuento, diera el pase a la final al filial de la Peña Deportiva. “Hubiera sido completamente injusto porque en la segunda parte tuvimos ocasiones de sobra para ganar”.
“Jugar una final siempre es muy bonito y es un gran aliciente para nosotros”, añade el zaguero, quien todavía recuerda la pérdida del trofeo contra el Inter Ibiza hace dos años en la primera edición de Copa tras un riguroso penalti y un angustioso gol en la prórroga. “Aquello fue muy doloroso y, ahora, nos llega una segunda oportunidad. Una final siempre es algo muy bonito de disputar, nos lo hemos ganado. El equipo ha sabido competir en los momentos clave, llevamos tiempo preparando la temporada y las sensaciones son muy positivas”.
“Sufrir tanto nos hace ser más fuertes”, resume Martín Monroy, atacante verdinegro, en referencia al pie salvador de su compañero. El delantero del Sant Jordi espera “una final con mayúsculas. Se dan todos los condicionantes para ello. El partido va a ser muy igualado y muy lindo de ver. Ojalá se puedan ver cosas para que duren en el recuerdo en la retina del espectador”.
En el otro bando, en Sant Miquel de Balansat, las sensaciones son algo diferentes. Se trata de un proyecto nuevo, todavía en periodo de construcción y, además, con el añadido de no poder pelear por el posible ascenso a Tercera División por la reciente incorporación del club a la categoría tras varias temporadas sin competir en la misma. El fútbol en la pequeña localidad del norte de la isla se cuece a fuego lento.
“Después de varios años sin tener equipo, regresar y alcanzar la final de Copa es una ilusión máxima”, afirma el técnico anaranjado, Víctor Langreo, quien no ha tenido tanto margen de maniobra como su oponente del domingo. “Hay jugadores que no se han incorporado hasta hace dos semanas y alguno está de viaje ahora. Nos ha costado algo al principio, pero ya estamos en buena dinámica y, por supuesto, con muchísima ilusión por brindar un título a la afición y a la junta directiva”.
Uno de sus defensas referente, José Reales, va camino de su tercera final copera. “Vamos de menos a más, nuestros números son buenos y, aunque llevamos poco tiempo todos juntos, las sensaciones son muy buenas”. Su compañero Rubén Nicolás, por su parte, se muestra en términos similares. “El primer objetivo de la temporada era la Copa y estamos a un paso de conseguirlo. Nuestro proyecto es a largo plazo, pero a nadie le amarga un dulce. Llevamos poco tiempo entrenando todos juntos, pero estamos creciendo rápido, la confianza es máxima y estamos muy ilusionados con el trofeo”.
¿Quién es el teórico favorito para llevarse el título? En este asunto la controversia entre ambos contendientes es máxima. “Creo que el Sant Jordi es favorito”, afirma José Reales, para después agregar: “llevan tres meses preparándose y, por tanto, están más rodados. Nosotros llevamos muy poco tiempo entrenando juntos y ellos, ahora mismo, tienen más fondo de armario. Son ligeros favoritos”. “Es una manera de quitarse presión”, contarresta David Sunder. “Para mí ellos son favoritos por el recorrido que llevan en su carrera y porque son grandes jugadores. Todos o casi todos han jugado en Tercera División”.
Preguntados al tanto, tampoco los técnicos se ponen de acuerdo en la tesitura: “Puede dar la sensación de que el Sant Jordi llega más rodado. Han empezado a entrenar antes y son un equipo joven, con mucha ilusión. Para nosotros la Copa ha sido una especie de pretemporada, pero una vez en la final, la ilusión por ganarla es máxima y todo se iguala”, comenta Víctor Langreo. “Nosotros somos un club reconocido en la isla, pero no somos favoritos a nada”, argumenta Rafa Payán, quién añade otro componente importante. “Ellos han apostado económicamente por un proyecto fuerte y tienen jugadores referentes en la categoría. Nosotros somos totalmente amateurs”.
Donde sí existe unanimidad es en el atractivo color que presenta la Regional Preferente esta temporada: “Bienvenida la diversidad”, resume con acierto el futbolista del Sant Jordi Martín: “El año pasado había tres equipos muy fuertes y con un escalón de diferencia sobre el resto. Este curso, todo está más igualado. Cualquiera le puede quitar puntos a cualquiera. Va a ser una temporada muy disputada y eso nos motiva”.
“Va a ser una campaña muy igualada, ningún rival va a ser fácil de batir”, agrega Rubén Nicolás desde la Penya Indepedent. En este sentido, David Sunder opina: “Antes, había falta de oportunidades para la gente que salía de la cantera de los equipos, pero ahora se les puede dar continuidad. Hay más equipos y el fútbol de la isla lo va a agradecer. La gente está con muchas ganas y mucha ilusión”.
Ante tan trascendental cita, se espera una buena afluencia a sa Creu este domingo: “El fútbol regional tiene mucho tirón en la isla. Llevo cuatro temporadas aquí y cada vez que hay un partido importante, la gente responde”, destaca el gaditano José Reales. “Estamos ante una semana diferente, no cabe duda. La Copa está centralizando nuestra atención y estamos a un partido de entrar en la historia del club. La afición va a responder seguro”, comenta el verdinegro Martín.
Para Víctor Langreo, la Copa “es una competición local, pero la gente siempre responde cuando hay enfrentamientos de nivel”. Su pupilo Rubén Nicolás considera que “la Regional Preferente la compite gente de la isla y eso hace que sea más placentero para el espectador”. “Ver tanta gente en la grada, como el pasado sábado, te da ese plus extra tan bonito de sentir”, concluye Rafa Payán.
Fútbol regional con mayúsculas a la espera del primer nombre propio del curso que acaba de arrancar. Sant Rafel dictará sentencia, el domingo, a partir de las 17 horas. Suerte para ambos finalistas.