Después de cinco derrotas consecutivas, el Portmany, por fin, ha logrado poner freno a su mala racha de resultados al empatar (1-1) frente al Santa Catalina en el debut de Nacho Villodre en el banquillo tras el cese de Carlos Marí. El resultado no alivia la maltrecha situación deportiva del conjunto sanantoniense, que sigue en puestos de descenso, pero, al menos, permite recobrar la confianza perdida en las últimas fechas.
El míster madrileño tenía muy claro que el encuentro ante el Santa Catalina, un rival directo, había que ganarlo sí o sí, pero, pese a las ganas mostradas por los jugadores, el Portmany únicamente ha podido sumar un punto gracias al gol en el minuto 89 de Manu Ribas, que salió al rescate de su equipo cuando muchos aficionados se temían lo peor.
Robertito, en el minuto 13, dio alas al cuadro portmanyista con un gol que permitió soñar a la parroquia local con un nuevo triunfo de sus futbolistas, pero el Santa Catalina no estaba dispuesto a regresar a Mallorca de vacío y se lanzó a por el gol del empate, tanto que llegó a la media hora de juego por mediación de Juan Antonio.
En la segunda parte, el Portmany sufrió un nuevo mazazo. En el 56, el conjunto que dirige Daniel Vaquer puso contra las cuerdas a la escuadra de Nacho Villodre, que se vio obligada a remar a contra corriente. Lo intentaron los sanantonienses durante muchos minutos, pero el gol no hizo acto de presencia. Y cuando todo apuntaba a una nueva derrota local, apareció Manu Ribas para salvar los muebles en el debut de Nacho Villodre.