Francisco Natera. El Isleño se desangra. El club ibicenco sufre una de sus peores crisis desde que lograra el ascenso a Tercera División hace dos temporadas. Con el equipo en regional -al menos, de momento-, con una importante deuda -se cuenta en los mentideros que podría llegar a los 100.000 euros-, sin masa social y con un futuro, cuando menos, poco esperanzador, la junta directiva , para más inri, se ha dividido hasta el punto de que todos, menos Murtera, quieren desligarse del Isleño para gestar un nuevo proyecto de fútbol base en la entidad hermana, el Illa d’Eivissa. Ninguno de los responsables atléticos comulga con el presidente, que ha perdido toda credibilidad después de la pésima gestión que ha desarrollado y ya le han comunicado que quieren dejar el club para relanzar las categorías inferiores, demasiado olvidadas últimamente.
Murtera no ha puesto pegas a la marcha de su equipo de trabajo, aunque antes ambas partes tienen que arreglar varios asuntos, como el tema de la publiciad estática del estadio y la gestión del bar. No hay marcha atrás. El presidente se queda solo al frente del Isleño. El fútbol base no le importa y su única intención es quedarse con el primer equipo.
Con Toni Torres apunto de anunciar públicamente su marcha -según adelantó Diario de Ibiza-, el dirigente no tendrá más apoyo que el que logre conseguir a partir de ahora, pero muy pocos creen en Murtera, por lo que, si es verdad que quiere seguir liderando a los corsarios, tendrá muchos problemas para confeccionar una plantilla, ya sea en Regional o en Tercera División. Aunque antes tendrá que pagar los 9000 euros que la unión deportiva debe al ex entrenador Antonio Asensio y el contrato de David Torres, que tampoco ha cobrado desde que aterrizó en Can Misses. Si no liquida esta deuda, el Isleño no podrá hacer ficha alguna para la temporada que viene y, tal y como están las arcas, será muy complicado que pueda hacer frente a este pago. La situación económica del Isleño es tan preocupante que en el último partido de Liga, frente al Ciuadela, fue una persona vinculaa al club quien tuvo que poner de su bolsillo 2000 euros para pagar a los jugadores, quienes se habían negado a jugar si no cobraban parte de lo adeudado.
Se cuenta en Radio Calle que podría haber un grupo inversor que estaría dispuesto a tomar las riendas de la entidad, pero no deja de ser un rumor. El Isleño tiene los días contados y su futuro pasa porque mantenga la categoría, entre dinero de manera urgente y sean otros los que gestionen un club que no ha generado ningún tipo de simpatía durante su estancia en el torneo balear. Veremos lo que ocurre, pero mucho tienen que cambiar las cosas para que la entidad de Vila vuelva a sonreír y limpie la imagen que actualmente tiene.
quien a pagado la deuda sera otra vez ibon begoña o obras gabriel pues no creo q lo pague ni kiko pepe.yo se de buena fuente de un exjugador q el año pasado fue el de obras gabriel q dio una cantida similar para lo mismo pero no se llego a pagar.COMO SE TE A PUESTO LA COSA “CURA”