Como hiciera la Peña Deportiva en 2015, el Portmany también quiere reflejarse en el espejo del Villarreal, club que cuenta con una de las mejores canteras del país, para proyectar su experiencia en el mundo del fútbol hacia sus categorías inferiores, también muy valoaradas en la isla. Para ello, el club que preside Nacho Andres ha alcanzado un acuerdo de colaboración con la institución castellonense, una alianza con la que se pretende potenciar la formación de los entrenadores de la base portmanyista con la metodología de trabajo que usa un club de Primera División.
Además, gracias a la firma de este convenio, el Villarreal realizará un seguimiento de los jóvenes jugadores más destacados del Portmany, quienes podrían formarse y competir en la localidad de Castellón si sus técnicos así lo consideran. “La verdad es que para nosotros es una gran satisfacción poder contar con el soporte técnico y la experiencia de una entidad como el Villarreal”, asegura el máximo responsable del Portmany. “Es un gran paso en el proyecto deportivo que queremos llevar a cabo”, añade el dirigente del Portmany.
Con motivo de esta unión entre clubes, el campo de fútbol de San Antonio vistió ayer sus mejores galas para celebrar este histórico momento en una cita donde los protagonistas fueron los chavales de la cantera y el exjugador del Villarreal, campeón de Europa con la Roja, Marcos Senna, que hizo las delicias de padres, entrenadores y futbolistas, quienes pudieron compartir y disfrutar de todo un crack, ahora embajador del submarino amarillo. “Los chicos se lo pasaron muy bien con su presencia, haciéndole preguntas y escuchando muy atentos las vivencias del que fuera un gran profesional de este deporte”, dice Nacho Andrés, que agradece la predisposición que ha tenido el Villarreal durante todo el proceso de este convenio.
