Se incorporó en enero al San Rafael procedente del Puig d’en Valls. Sin apenas hacer ruido, pero con toda la confianza del mundo, José Luis Reyes trabajó para adaptarse rápido al compás de Tercera División y aguardó a que llegara su oportunidad.
“El grupo que hay en el equipo es genial. Los compañeros me ayudaron a adaptarme, pero me tuve que poner las pilas rápido porque el ritmo que tenían ellos era bastante superior al mio, ya que llegaba de un Regional. Físicamente también estaba bastante flojo, aunque me puse allí a entrenar con ellos a un ritmo bastante alto. Eso me ayudó a coger el ritmo un poco antes, pero aún me falta mucho trabajo”, señala, motivado, el nuevo futbolista blue.
El día de su debut saltó al terreno de juego a falta de siete minutos y marcó en Sa Creu un gol antológico a pase de su portero Santi. Ese primer tanto, logrado en el último suspiro del partido, sirvió para que los rafelers salvaran un punto en casa ante el Esporles.
“La verdad es que fue brutal. Qué mejor que debutar logrando un gol, aprovechando los minutos que me da el míster, intentando hacerlo lo mejor posible y ayudando al equipo en todo lo que se pueda”, comenta Reyes.
Ya lleva anotados dos goles. Y el segundo, también providencial, se lo clavó este fin de semana al Collerense en su campo, pocos segundos antes de que el árbitro pitara el final del encuentro. Con ese chicharro, el atacante blue volvió a obrar otra vez el milagro de hacer que su equipo sumara otro valioso punto en los últimos instantes, aunque, en esta ocasión, a domicilio. De todos es sabido que la fe mueve montañas.
“Ha dado la coincidencia de que éste fuera también así de una forma parecida. Sí que es verdad que han sido con un poquito de suerte por mi parte. Habría sido mejor para una victoria, pero es algo que se agradece”, admite el nuevo goleador del plantel que entrena Vicente Román.
Ahora, José Luis Reyes, seguro de sus posibilidades, espera al Poblense con motivación y con plena fe en sus posibilidades a la hora de volver a convertirse en el hombre milagro de Sa Creu.
“No soy para nada religioso, ni supersticioso, ni nada parecido a la hora de salir a jugar. Considero que las cosas positivas, al final, salen siempre con trabajo. Soy de los que piensan que no hay mejor manera de conseguir algo que trabajando hasta que tienes el premio”, reconoce el estilete.
Sin embargo, el oportunista goleador del San Rafael, que tiene ganas de seguir dando que hablar, espera con optimismo a que le llegue su nueva ocasión mañana jueves ante el equipo de Sa Pobla.
“Va a ser un partido complicado porque ellos son un equipo fuerte y goleador. Es de los tres mejores de la parte de arriba. Será difícil, pero es como todo. Habrá que salir y demostrarlo en el campo. Al Mallorca ya le plantamos cara en nuestro campo, y creo que éste va a ser un partido muy parecido. Si estamos como el día del Mallorca y con las ideas claras, creo que casa podemos ganarles. Si juego, intentaré hacerlo lo mejor posible para seguir ayudando al equipo y dando lo máximo hasta el final”, concluye el goleador de los minutos de los milagros.