Cuando todo apuntaba al regreso del Ibiza a Can Misses este sábado para medirse al Constància una vez finalizada la obra de instalación del nuevo césped artificial, la situación ha dado un giro inesperado y el equipo de Toni Amor no podrá jugar en casa porque los trabajos de reposición del caucho no estarán acabados esta semana, tal y como ha indicado la empresa crontratada. La humedad que ha acumulado durante los últimos días el material de relleno viejo (el extraído del anterior tapete) está impidiendo que éste se asiente sobre la hierba rápido y bien, por lo que los plazos de entrega del proyecto se han tenido que retrasar unos días.
Así pues, el Ibiza se ve obligado a buscar un nuevo campo de fútbol donde disputar el encuentro ante el Constància correspondiente a la jornada 17 (ya ha jugado en Can Cantó, Sant Josep y Santa Gertrudis) y el elegido es el Municipal de Santa Eulalia después de que los responsables de la Peña y la entidad de Vila hayan llegado a un acuerdo satisfactorio. La fecha y la hora del choque no cambia y se disputará el próximo sábado a las 16:00 horas. El bloque unionista tiene previsto entrenar en el coliseo blanco mañana viernes para aclimatarse a las medidas del rectángulo de juego así como al tipo de hierba para afrontar el partido de Liga con todas las garantías posibles.