Paco Natera En el Luchador por fin respiran tranquilos. Después de un verano de locos en busca de un entrenador que si hiciera cargo del primer equipo, la junta directiva del club verdiblanco ha encontrado un míster que encabece su enésimo proyecto deportivo en el fútbol regional. Y no ha tenido que ir muy lejos porque se trata de Emilio Pachón, un hombre de la casa que ha decidido arrimar el hombro después de las serias dificultades con las que se ha topado la entidad presidida por Fernando Roa para contratar un preparador ajeno a la propia sociedad futbolística de San Antonio.
Emilio Pachón ha sido la solución de última hora para que el Luchador pudiera arrancar la próxima temporada. “Y menos mal que al final ha aceptado coger al equipo, ya que de no ser por él no hubiéramos empezado la Liga”, apunta el presidente del club sanantoniense. “Es un míster vinculado al club y ya lo entrenó hace dos temporadas”, recuerda el mandamás, que relata la dificultad que han tenido en la directiva para convencer al estratega. “No quería hacerse cargo del Luchador porque tiene mucho lío en su vida personal con su trabajo y familia y no ha sido hasta hace dos semanas cuando confirmó que aceptaba el reto. La verdad es que lo hemos pasado mal con el tema del entrenador”, explica Fernando Roa.
El Luchador arranca la pretemporada el próximo 4 de septiembre y su objetivo no es otro que disfrutar del fútbol y competir cada domingo. “Desde 1980, cuando se fundó el club, siempre hemos participado, cada año, en el fútbol regional. Esta temporada, afortunadamente, volvemos a la carga y lo hacemos con mucha ilusión, para dar guerra y hacer el mejor papel posible”, comenta el presidente. “Problemas de jugadores no tenemos; hay disponibles futbolistas para hacer un plantilla competitiva”, prosigue el máximo responsable del Luchador, un club humilde, gestionado día a día por un grupo de amigos. “Sacar adelante las temporadas nos cuesta la misma vida; nadie te regala nada, pero con ilusión vamos manteniendo la entidad”, indica.
Fernando Roa sueña con un gran Luchador, un equipo que pelee por el título y pueda aspirar a cotas más altas, pero “es complicado”. “Somos un equipo de pueblo, sin apenas recursos económicos y con una estructura de club limitada. Para estar arriba en la tabla se necesitas grandes jugadores y nosotros no podemos tenerlos porque antes se van a equipos más competitivos, donde puedan pelear por títulos y por ascensos”, afirma el presidente del club, que, eso sí, habla con mucha esperanza de sus dos equipitos de fútbol base. “Tenemos dos prebenjamines que son el futuro del club; la idea es ir creciendo a medida que los niños también lo hagan e ir incrementando las categorías inferiores poco a poco”, finaliza el dirigente del Luchador.