Paco Natera Ibiza sigue recibiendo la visita de las grandes estrellas del planeta fútbol. Pese a que muchos cracks ya han acabado sus vacaciones, otros todavía disfrutan de unos días de relax en la isla. Es el caso del delantero colombiano Carlos Bacca, que ha compartido mesa y mantel con su familia en el restaurante El Barco, donde trabajan, curiosamente, dos fieles seguidores del Sevilla, exequipo del goleador hace dos temporadas. Los Vargas, padre e hijo, se han fotografiado con el futbolista del Milan, quien es noticia últimamente porque podría dejar el equipo rossonero para recalar en el Inter, club que estaría dispuesto a hacerse con los servicios del jugador, de 29 años.
Y mientras se especula con el posible destino de Bacca, el goleador, que también ha sonado como posible refuerzo del Barça, medita su futuro en Ibiza, donde se lo pasa en grande junto a los suyos. “Hemos hablado de su su época en el Sevilla; le he dicho que como en el Sánchez Pizjuán en ningún sitio y me ha dicho que sí, que tengo razón, que como en Sevilla no hay ningún sitio ni equipo donde se esté tan bien”, apunta Antonio Vargas, conocido futbolista de la isla. “Han comido bullit de peix y la verdad es que les ha encantado”, agregó el responsable del Restaurante El Barco, a quien le hubiera gustado saber el próximo equipo de Bacca. “No nos ha dicho nada al respecto”, aclaró el camarero.
El delantero sudamericano llegó el pasado verano al Mlian a cambio de 30 millones de euros después de una buena temporada en el Sevilla (56 partidos, 28 goles). Pese a convertirse en el máximo goleador del equipo (20 goles en 45 partidos sumando todas las competiciones), el jugador se ha convertido en uno de los grandes protagonistas de la actualidad de los milanistas, ya que podría abandonar el equipo. El futuro de Bacca, de momento, es toda una incógnita. Habrá que esperar unos días para saber cuál es el club que se lleva el gato al agua y poder disfrutar así de los goles del carismático estilete que dejó huella en el Sevilla, donde es todo un ídolo.