Francisco Natera. Uno ya ha tocado el cielo futbolístico y el otro sueña con hacerlo algún día. Koke, jugador internacional del Atlético de Madrid y Gorka, futbolista del equipo benjamín del Formentera, cruzaron sus caminos ayer domingo en la playa de Illetes y posaron en una fotografía que, por qué no, podría ser histórica dentro de algunos años. Ambos cracks simbolizan el sacrificio y la disciplina, así como la ilusión y la esperanza por conseguir un sueño.
Koke, tras la eliminación de España a las primeras de cambio del Mundial de Brasil, decidió olvidar las penas en las Pitiusas, donde disfruta de lo lindo en buena compañía. El rojiblanco se relaja y carga pilas en sus vacaciones después de una brillante temporada con el conjunto de Simeone, conquistando el campeonato de Liga, y un excepcional europeo con La Roja sub-21, donde alzó al trofeo en el año 2013. Al centrocampiseta, de 22 años, le depara un gran futuro.