El taekwondo ibicenco tiene un nombre propio que brilla con fuerza: Javier Linero. Campeón de España en categoría sénior y nuevo referente del deporte local, el joven deportista ha sido recibido esta tarde en el Ayuntamiento de Ibiza por la concejala de Deportes, Catiana Fuster, en un acto tan simbólico como merecido.
La imagen lo dice todo: campeona y autoridad, frente a frente, compartiendo una sonrisa cargada de orgullo. Linero, con la humildad de los grandes, y Fuster, visiblemente satisfecha de poder reconocer el talento nacido en casa. No hubo discursos grandilocuentes ni alfombra roja, pero sí el respeto sincero a quien ha llevado el nombre de Ibiza a lo más alto del tatami nacional.
Este gesto institucional es mucho más que una foto bonita. Es el respaldo de una ciudad a uno de sus atletas más prometedores, y también un guiño al trabajo silencioso que hay detrás de cada medalla. Porque si algo representa Linero, además del oro, es el espíritu de superación que mueve al deporte pitiuso.
El taekwondo no suele copar portadas, pero con campeones como Javier, empieza a ganarse su espacio a base de méritos. Y ahí estaba hoy Catiana Fuster para dejar claro que Ibiza celebra los éxitos y también los acompaña.