No hubo lugar para la sorpresa en Sant Miquel. La Penya Independent firmó una de esas victorias que no admiten discusión, imponiéndose con un rotundo 5-0 al Migjorn en un duelo sin historia, más allá del dominio absoluto de los locales. El partido, correspondiente a la jornada 20 del Grupo 11 de Tercera RFEF, se había aplazado el fin de semana anterior debido a la cancelación del vuelo del conjunto menorquín, pero nada cambió el desenlace inevitable de un choque desigual desde el primer minuto.
El Migjorn llegó a Ibiza en cuadro, una circunstancia que dejó en evidencia la fragilidad de un equipo hundido en la clasificación y con pocas esperanzas de salvación. La Penya, consciente de la oportunidad de recuperar el liderato, no tuvo piedad. A los de Sant Miquel les bastó una primera mitad de dominio apabullante para encarrilar el triunfo. Alberto abrió el marcador y repitió para establecer un 2-0 que ya reflejaba la superioridad local al descanso.
Lejos de levantar el pie del acelerador, la Penya salió en la segunda parte decidida a convertir el partido en una exhibición. Gastón, con un doblete de puro depredador del área, y Bilal, con otro tanto que selló la goleada, redondearon una tarde perfecta para los ibicencos. La solidez defensiva fue un mero trámite ante un rival que apenas pudo inquietar, más aún con el debut del portero juvenil Hugo, quien vivió un estreno plácido bajo palos.
Este triunfo devuelve a la Penya Independent a lo más alto de la tabla y refuerza su condición de fortín inexpugnable en casa: diez victorias en once partidos, sin conocer la derrota ante su afición. Por su parte, el Migjorn sigue anclado en el último puesto, con siete puntos y un abismo de 14 unidades respecto a la salvación que marca el Llosetense, un panorama que se oscurece jornada tras jornada.
Con este paso firme, la Penya sigue demostrando que no está dispuesta a ceder terreno en su carrera hacia el ascenso, mientras que el Migjorn parece condenado a una lucha desigual contra un descenso que cada vez se siente más inevitable.