La isla de Ibiza es un lugar particular. Pese a su reducido tamaño, en extensión y población, es habitual que el nombre de la isla se ponga en la mesa de inversores locos, inversores cuerdos, millonarios de verdad, millonarios de pega o falsos filántropos de dudosa honestidad, todos a la caza de la supuesta gloria y gallina de los huevos de oro llamados “marca Ibiza”. Y en el fútbol, cíclicamente, aparece una bomba relacionada con nuestra isla y nuestro balompié. Esta vez le ha tocado al Portmany. Y la cosa va muy en serio.
Según ha podido contrastar Fútbol Pitiuso, la SD Portmany está a punto de entrar en una nueva dimensión. Y no hablamos de su primer equipo, actualmente en 3ª RFEF, sino de su cantera. Y es que el club portmanyí, si todo va como indicia el plan, verá convertida su academia en una referencia en España y, si todo sale según lo deseado, también en Europa.
La clave de todo pasa por Eagle Football Holdings, un grupo mutipropiedad de clubes de fútbol en auge que mira ya de tú a tú a otros como City Group (Manchester City, NY City, Girona y muchos más) o Red Bull (con el RB Leipzig y el RB Salzburg como puntas de lanza). Eagle es propiedad del excéntrico estadounidense John Textor, multimillonario tras amasar una fortuna en la industria del entretenimiento, especialmente en tecnologías de efectos visuales. Textor ha ido ampliando su álbum de cromos y ha estado en boca de todos recientemente al coronar a uno de sus equipos referencia, el Botafogo brasileño, campeón de la Copa Libertadores por primera vez, además de levantar también el Brasileirao. El conjunto de Río de Janeiro es el más exitoso de una lista que forman también el Olympique de Lyon francés, el Molenbeek belga, la academia de fútbol en USA FC Florida y el Crystal Palace de la Premier League inglesa. Pero, ¿qué pinta el Portmany en todo esto? Pues es a partir del club londinense del palacio de cristal dónde empieza esa conexión. Y es donde entra Andy Mackay, aficionado del Palace y empresario enamorado de la isla de Ibiza, Mackay es el impulsor de ilustres negocios en la bahía de Portmany. Sin ir más lejos, su Ibiza Rocks aparece reluciente en la camiseta roja del equipo de Sant Antoni como patrocinador principal. Como amante del fútbol, hace tiempo que se le metió en la cabeza poder ver a “su Portmany” peleando en la élite, y ha servido de nexo, de intermediario, con el Crystal Palace.
Mackay mantuvo conversaciones informales con directivos del club del sur de Londres intentando dar forma a algún tipo de colaboración entre ambos clubes. Esa idea primigenia acabó mutando en reuniones formales entre el grupo Eagle Football Holdings y la SD Portmanyy por fin se ha sellado un acuerdo. El Portmany pasa a ser controlado por del grupo de Textor. En un futuro proceso de conversión a SAD, Eagle adquirirá entre un 70 y un 80% de las acciones del club, con un único objetivo: convertir al Portmany en una fábrica de futbolistas.
Se intentara que todos los equipos de base rojos hagan las veces de “selección” con los mejores jugadores de la isla, ya desde pre benjamines. También se incorporaran jugadores de todas las edades de todo el país, e incluso del extranjero, con especial foco orientado a África. Todo, con un único objetivo, un juvenil top español que pueda ser fábrica de jugadores para, a su vez, generar ingresos al abandonar el club.
El juvenil A del Portmany lidera ahora con mano de hierro la liga de Ibiza. El ascenso pasa a ser ahora una necesidad para el club, para no “perder” un año en el proceso. La temporada que viene, ya como “cantera” de Crystal Palace o OL, se buscaría el ascenso desde Nacional a División de Honor. Y ya de la 2026-27 en adelante, dar pasos hacia lo máximo. Y cuando hablamos de lo máximo, hablamos de pelear los títulos de Liga y Copa con una meta final: ver a la SD Portmany en la Youth League antes del final de la década.
Textor quiere que el Portmany suene a algo así como la Masia, la Fábrica, o las canteras top de clubes franceses, alemanes o neerlandeses. En la cabeza de los responsables deportivos de Eagle está también la idea de que algunos jugadores en edad cadete de la cantera de Botafogopuedan venir a acabar su formación a Europa, en el Portmany o en el Molenbeek, para agilizar así su adaptación al viejo continente. Para eso, además, necesitaría obviamente un cambio en las instalaciones municipales, principalmente la sustitución del césped sintético por uno natural, y ya ha habido contactos con el consistorio portmanyí, que, según algunas fuentes consultadas, está encantado con la idea de poner SantAntoni en el mismo mapa futbolístico que Real Madrid, Barça o Manchester City.
¿Veremos un Portmany – Bayern de Múnich, o un PSG – Portmany juvenil? Si todo sale como marca la hoja de ruta, podemos soñar con ello en unos pocos años.