El Ibiza vio truncadas sus aspiraciones de ascenso al ser superado por el Barça Atlètic con un marcador de 5-3 en un partido que se descontroló en la segunda mitad. El equipo ibicenco, que había dominado el encuentro hasta el descanso, se desmoronó tras una serie de goles encajados en pocos minutos.
El Ibiza encaraba este partido como una auténtica final. El entrenador Onésimo apostó por un once inicial con claras intenciones ofensivas, pero fue el Barça Atlètic quien dominó el balón en los primeros minutos. Sin embargo, el Ibiza empezó a encontrar su ritmo y, en el minuto 17, un centro-chut de Soko que casi se convierte en gol marcó el inicio de su ofensiva.
Poco después, Escassi adelantó al Ibiza empujando a la red un balón suelto tras un remate fallido de Pepe. Este gol igualaba la eliminatoria y daba alas a un equipo que se veía cada vez más seguro en el campo. Aunque el Barça cerraba bien las bandas, el Ibiza encontró otra oportunidad clara con un remate al larguero de Cedric en un saque de esquina.
Justo antes del descanso, Escassi volvió a marcar tras un saque de banda, poniendo el 0-2 y desatando la euforia ibicenca. Sin embargo, el Barça Atlètic recortó distancias rápidamente con un gol de Marc Guiu, dejando el marcador 1-2 al final de la primera mitad y manteniendo la eliminatoria abierta.
En la segunda parte, el Ibiza introdujo a Fausto Tienza para evitar riesgos con Jesús Álvarez, quien tenía una tarjeta amarilla. A pesar de una buena ocasión inicial para el Ibiza, el Barça Atlètic igualó el marcador con un golazo de Pau Víctor. Este tanto fue un golpe duro para el Ibiza, que había jugado mejor hasta ese momento pero veía cómo su ventaja se desvanecía.
El partido se descontroló en pocos minutos, con el Barça anotando tres goles en rápida sucesión, todos por medio de Unai. Los errores defensivos y el desorden en el equipo balear fueron fatales. Onésimo intentó reactivar a su equipo con cambios, pero el daño ya estaba hecho. Aunque Rubén anotó un golazo desde fuera del área, el esfuerzo no fue suficiente.
Con el pitido final, se esfumó el sueño del ascenso para el Ibiza. Ahora, el equipo se centrará en luchar por su objetivo la próxima temporada.
