Víctor M. Victoria Mal arranque de año para los tres equipos pitiusos que compiten en la Liga Nacional Juvenil, y que saldaron con derrota sus respectivos compromisos en la última jornada de la primera vuelta. La UD Ibiza no pudo hacer frente al tremendo potencial del segundo clasificado, el Mallorca B, que se impuso por un contundente 0-4 en Can Cantó. Los celestes aguantaron la primera media hora de partido, pero sucumbieron en la recta final del primer acto a los goles visitantes de Alejandro Yerga (34’), Biel Serra (39’) y Luis Quiros (45’). Álvaro Torres, en la recta final del duelo (79’), completó la exhibición visitante. El conjunto que dirige Manu Tarrazo concluye la primera vuelta duodécimo con 18 puntos, ocho por encima del descenso, y se medirá a la Penya Ciutadella en casa en la siguiente jornada.
El Portmany plantó batalla en su visita al feudo de la Penya Arrabal, pero al final acabó perdiendo 5-4 en un partido muy vistoso en el apartado ofensivo. Los hombres de Iván Granados tuvieron que remar a contracorriente tras un flojo inicio de partido en el que recibieron dos golpes, y después siempre fueron por detrás en el electrónico. Los goles de Sergio Beltrán (9’, 47’ y 71’) dieron esperanzas de que sumar al menos un punto era posible, pero al final la igualada no se acabó produciendo y los tres puntos se quedaron en el Toni Tatxa. El conjunto de San Antonio alcanza el ecuador de la competición en penúltima posición, con solo seis puntos en su haber, y una distancia de once unidades con los puestos de salvación. Pero mientras hay vida hay esperanza, y el próximo partido contra el Alaior de visitante puede servir de punto de inflexión.
Finalmente, el último representante de nuestras islas, el Formentera, cayó de nuevo derrotado con la casaca de visitante, esta vez en el feudo del Andratx, rival directo por la salvación, por 3-1. El equipo de Christian Núñez viajó muy mermado de efectivos a tierras mallorquinas, con solo once jugadores disponibles, y sin posibilidad de hacer cambio alguno. Nestor Porto vio portería para los locales en el arranque de la cita (9’) y Gerard Ribot en el del segundo acto (46’), adversa situación que mejoró con el tanto rojinegro de Adrián (65’). Sin embargo, en los minutos finales del duelo llegó la sentencia de Jorge Pulgar (63’), que llenó de desolación a la plantilla visitante. Los formenterers terminan así la primera vuelta con cinco puntos, a doce de la salvación, y el partido contra el Santa Catalina en Sant Francesc se antoja de nuevo crucial para avivar la llama de la salvación.