Víctor M. Victoria 180 minutos para el sueño del ascenso. Peña Deportiva B y Penya Independent afrontan este fin de semana la batalla final de la temporada, la que permite el salto de categoría a la Tercera RFEF. Los dos mejores equipos de la Regional Preferente se ven las caras en un cruce a doble partido, que comenzará este domingo con el duelo de ida en Sant Miquel de Balansat a partir de las 20:30 horas.
Se espera un ambiente de los grandes en el feudo del club de Sant Joan, que persigue con ahínco desde hace dos campañas abandonar las catacumbas del fútbol amateur. Tras el fracaso del curso pasado, cuando se desperdició un ascenso casi hecho en favor del Inter Ibiza, la entidad que preside Toni Curuné afronta el partido más importante de su historia reciente.
Y para ello, el plantel anaranjado se ha encomendado a la sabiduría de un técnico con brillo en el pasado, como Mario Ormaechea, que sustituyó a Carlos Tomás en el banquillo a mitad de temporada, y a la calidad de jugadores muy contrastados en la categoría como Reales, Curuné, Reyes y Tomillero, entre otros. Un currículum con mucha experiencia que bien puede significar un ascenso.
El técnico catalán ha afirmado este jueves que ve al equipo “muy centrado, con esa calma tensa de las grandes ocasiones. Estoy muy contento con el rendimiento de mis jugadores hasta la fecha y esperamos un gran ambiente porque es un horario muy bueno. Hemos sido bastantes superiores a los equipos de Menorca (Mahón y Alaior) y esperamos hacer un buen papel en la final”.
El preparador, que mantiene la duda de varios jugadores para la cita del domingo, ha considerado que la final enfrentará a dos equipos “muy diferentes”. “Ellos tienen mucha energía, pero intentaremos contrarrestar este hecho con las diferentes armas que poseemos. Preveo una eliminatoria igualada y que se decidirá en Santa Eulària en el partido de vuelta”.
Finalmente, sobre el partido decisivo de la fase regular que se saldó con derrota para su equipo y que otorgó el título liguero a su máximo rival, Ormaechea ha enfatizado que “la ligas no se pierden solamente en un día, sino durante toda la temporada. Y ahora solo uno de los dos conseguirá el ascenso, pero hay que mirar el buen trabajo que hemos realizado ambos equipos”.
Y no le falta razón al técnico barcelonés, pues Penya Independent y Peña Deportiva B han gobernado con máxima igualdad la competición liguera, que se decidió con un empate a puntos en lo alto de la clasificación pero mejor goal average para el conjunto peñista. Las dos formaciones, además, han solventado con holgura las eliminatorias previas a la gran final, en el caso peñista contra el Migjorn menorquín y el Sant Josep.
La segunda vuelta del filial de Santa Eulària ha sido realmente arrolladora, con un equipo joven, cargado de ilusión y entusiasmo, que no han encontrado rival alguno que le tosiera. Además, el estado moral de la plantilla es enorme, especialmente tras la conquista del título liguero, y la posible presión en el playoff de ascenso tampoco ha menguado el rendimiento de los jugadores.
Para Cristian Carranza, técnico de los de Santa Eulària, la gran final se trata de una eliminatoria “que se decidirá en el partido de vuelta. Ellos son los favoritos, porque tienen una plantilla hecha para ser campeones, pero nosotros tenemos mucha hambre, juventud y, aunque somos conscientes de la dificultad, estoy convencido de que podemos sacar un buen resultado de allí”.
Para el preparador del equipo blanco, su grupo de futbolistas “no ha cambiado rutina alguna” durante la semana pese a lo mucho que hay en juego: “Nos hemos convertido en una familia y este duelo lo afrontamos como un partido más, valorando que llegar aquí es muy complicado, y por ello ahora tenemos que disfrutarlo. El equipo está con ganas, lo veo muy conectado, y aunque respetamos mucho al rival, tendremos nuestras opciones. Saldremos a por el partido sin perder nuestra esencia”.
Dos equipos, 180 minutos y un único destino: el ascenso a la Tercera RFEF.