Noudiari Que el Sant Jordi ha llegado a la Liga balear de Tercera División para quedarse se ha convertido en una obviedad en un puñado de jornadas nada más. Pero este no va a ser, ni mucho menos, su techo esta temporada.
El equipo quiere más y sueña, por qué no, en cotas más altas. Y no va mal encaminado. Esta mañana ha sumado un valioso punto a domicilio en el campo del líder del Grupo 11B de Tercera División, el Platges de Calvià, ante el que se ha adelantado y al que ha tuteado en la pelea por la victoria.
Tiene el bloque verdinegro un grupo compacto, joven y con ganas de hacer cosas importantes, con lo que, visto lo visto hasta la fecha, no es descabellado pensar en algo más que la permanencia a pesar de su condición de recién llegado a la categoría.
Y más habida cuenta de que ocupa la segunda plaza de la clasificación, empatado a puntos con el primero, el rival de esta jornada, y le saca cuatro al tercero, el Formentera.
Cristo ha adelantado a los ibicencos en el minuto 29, pero el Calvià no ha tardado en reaccionar y Gregorio, antes del descanso, en el 41, ha devuelto la igualdad al marcador.
La voluntad de los dos protagonistas no ha variado el marcador en un intenso segundo tiempo que se ha resuelto sin goles.