diariodeibiza.es Sin contar a Osky, que regresó a Asturias con la temporada recién comenzada, y a Berto, Ausín y Newman (las bajas de larga duración, prácticamente inéditos esta temporada), la Peña Deportiva no podrá disponer de otros cuatro jugadores para el encuentro de vuelta ante La Hoya Lorca. Jaime sigue lesionado (Torres volverá a ser suplente accidental) y Aitor recibió en la ida una roja de la que más de uno se puede acabar acordando por la falta de efectivos peñistas. Además, Paco Maline se fastidió el talón al pisar una rejilla del desagüe del campo en un lance del duelo de Santa Eulària –que quedó 3-3, otorgando una carta a los de Mario Ormaechea para dar la campanada en tierras murcianas–.
Poco antes de la lesión, había marcado un tanto tan increíble como vital: un petardazo desde 40 metros que se coló en la portería de un aturdido Navarro.
El míster catalán espera disponer de otro golpe de suerte así sobre el césped del Artés Carrasco. Un 0-1 en el descuento y, si te he visto, no me acuerdo. Porque, a la ausencia de Maline, aunque quiere forzar para no perderse «el partido más importante» de su vida deportiva (y ha jugado unos cuantos, que el 16 de junio cumplirá los 34), se le suma la de su suplente habitual: Alfonso López, Fofi. «No sé qué me voy a inventar ahí», explicaba ayer Ormaechea. Todo apunta a que, ante la falta del carrilero sevillano por molestias en los tendones, tenga que tirar de Pau Pomar para cubrir el costado zurdo de una zaga que habrá de contener a la potentísima delantera lorquina (Chupi apunta al once inicial para dar más seguridad en el juego aéreo, faceta en la que el brócoli mecánico es un especialista), que ha metido 94 goles en 38 partidos ligueros y uno de play-off.
Uno de los que podría actuar en esa demarcación es Cristian Cruz. Sin embargo, el canterano, zurdo y jugador de banda, ha estado en la enfermería durante toda la campaña y solamente pudo debutar en Liga en las últimas jornadas, con el título ya en el bolsillo.
