Dicen que a un jugador las mejores alegrías se las da el fútbol. Que nadie entiende la satisfacción y el placer que se siente cuando se viste de corto y salta a un terreno de juego. Porque el balompié no es sólo un deporte; es diversión y, sobre todo, pasión.
El defensa Javi Rosa, tras dejar el pasado verano el Formentera después de una gloriosa etapa en la isla, volverá a correr detrás de un balón y de sus sueños en el Tarazona aragonés, club que milita en Tercera División, ocupando puestos de playoff y que esta temporada juega Copa del Rey, midiéndose en la primera eliminatoria al Rayo Vallecano de Segunda División.
“El Tarazona es un club al que sigo desde que nos enfrentamos en la Copa del Rey hace dos temporadas. He podido ver que es gran club y en el que vamos a disfrutar y donde se pueden hacer grandes cosas”, ha dicho, en sus primeras declaraciones tras su fichaje, el central murciano.
“No lo dudé ni un momento cuando recibí la llamada del Tarazona y la oportunidad de volver a jugar otra eliminatoria de Copa del Rey me motiva muchísimo. Vengo con un objetivo claro, que es el de subir a Segunda División B”, ha indicado, con ambición, un Javi Rosa que “nunca se fue y que ya está de vuelta”.
Muchas suerte figura.