El estilo es innegociable. Pablo Alfaro ha explicado esta tarde en rueda de prensa que, pese a la derrota contra el Atlético Baleares, el Ibiza no cambiará su propuesta futbolística en casa del Real Oviedo B, el rival que espera en la décima jornada del campeonato. «Las derrotas tienen que doler. Para eso intentamos ganamos el máximo número de partidos posible, pero habrá más derrotas seguro. Esto consiste en asimilarlas, saber por qué se producen, mejorar y seguir compitiendo«, ha explicado el míster. Los celestes viajaron ayer por la tarde a Asturias con ánimo de «hacer un buen partido en El Requexón» ante «un filial remozado», con una plantilla de calidad en la que hay «pocos jugadores asturianos».
Será el primero de los cinco filiales «muy diferentes» a los que se enfrente de forma consecutiva el Ibiza en las próximas cinco fechas. Para el primer envite ante algunas de las mejores canteras del fútbol español son baja segura Kike López y Gonzalo, por lesión. Si podrá contar Alfaro al cien por cien con Javi Lara para un partido donde podrán seguir repartiéndose minutos entre los integrantes de la plantilla ibicenca. «[En Oviedo] pueden entrar hombres que aporten otra frescura que necesitaremos ir teniendo durante la temporada», ha dicho Alfaro.
El aragonés considera que el proyecto del Ibiza está «muy vivo y vigente«. Como prueba, los 3.500 espectadores que llenaron Can Misses el domingo pasado y que seguirán a través de IB3 Televisió el encuentro de un equipo que buscará reeditar en la ciudad deportiva oviedista las buenas sensaciones que mostró como visitante en San Sebastián de los Reyes o Mareo. «Cada vez hay más adeptos, gente que cree en lo que se hace», ha explicado Alfaro, «y nuestro trabajo es intentar que se produzcan más días de festividad futbolística, de partidos que a todos nos gustan mucho. Hay que ser muy constantes para que lleguen ese tipo de partidos donde te juegas algo bonito«.