El Ibiza se ha reencontrado con la victoria en el mejor escenario posible, en un Can Misses con 1936 espectadores que han dado color y calor a unos jugadores que se han dejado el alma sobre el verde para derrotar a un Real Murcia que, pese a ir siempre por detrás en el marcador, nunca dejó de creer en sus posibilidades. El equipo de Andrés Palop, con un gran fútbol, dejó encarrilado el choque en la primera parte con los goles de Rodado (m. 16) y Giner (m.45). Tras el asueto, el equipo pimentonero logró meterse en el duelo con un tanto de Armando (m. 52), que dio oxígeno a los suyos ante un Ibiza con carácter y personalidad que buscaba rematar la faena sin descuidar la defensa. Y esta sentencia llegó en los últimos compases del choque (m. 79), cuando Jordi Sánchez envió el balón a la red con una efectiva vaselina para alegría de su hinchada, que festejó por todo lo alto el primer chicharro del ‘ibicenco’ con la Celeste. El Real Murcia no se vino abajo y cuando el partido tocaba a su fin (m. 87) puso el 3-2 en el marcador, pero el electrónico ya no se movería más y un Ibiza superior en líneas generales se metió en el bolsillo tres puntos para la esperanza, para seguir optando con serias opciones a los puestos de playoff.