Perder es una de las opciones que se da en el fútbol, pero al Formentera ni se le pasaba por la cabeza caer derrotado este mediodía, en el segundo partido de Liga, el día de su presentación delante de su gente, de su incondicionales y animosos aficionados. Finalmente, el equipo de Iván Gómez, que fue expulsado en el minuto 88 tras ver dos tarjetas amarillas, tuvo que resignarse y contemplar cómo festejaba la victoria el Constància gracias al solitario gol que marcó Borja en el minuto 61, silenciando a la parroquia formenterense que con tanta ilusión pobló el graderío del Sant Francesc.
El equipo rojinegro, así pues, tendrá que esperar, al menos, una semana más para poder dedicarse el primer triunfo del curso y hacer bueno el empate que arrancó en la jornada inaugural ante el Mercadal (0-0). Eso sí, tendrá que aplicarse más de cara a portería, ya que aún no sabe lo que es ver puerta, pese a contar con varias ocasiones claras frente al Constància, donde su portero, Torrandell, firmó una destacada actuación. La próxima jornada, frente al Santanyí, nuevo examen para un disgustado Formentera que pierde a su líder, sancionado tras su expulsión.