El Ibiza volverá a jugar la temporada que viene, muy a su pesar, en Tercera División después de caer eliminado en la final del playoff a manos del Levante B. El equipo de Rufete se jugó el ascenso en Buñol en la tanda de penaltis (después del marcador global de 1-1) y la fortuna le dio la espalda, pese a llegar a ponerse con un favorable 1-3 y tenerlo todo a su favor para alcanzar la gloria deportiva. Lamentablemente para los celestes, fueron los granotas quienes festejaron por todo lo alto la fiesta sobre el terreno de juego en contraste con el drama que vivió el plantel unionista, que acabó desolado tras el duro golpe que en esta ocasión le había deparado el destino. Junto con el apoyo de su fiel afición, que no dejó de animar a los futbolistas en la ciudad deportiva del Levante, el Ibiza tratará el curso que viene de cumplir el objetivo de subir a Segunda B.