@futbolpitiuso Lleva un día en la isla y ya se ha ganado el respeto y el cariño de sus compañeros y del cuerpo técnico. Y es que el último refuerzo de la UD Ibiza, el mediocentro Enrique Rivas, es un tipo cercano, humilde, simpático y, sobre todo, muy buena gente. A sus 24 años, el que está llamado a guiar desde la zona de creación al plantel unionista a Tercera División, atesora una contrastada calidad, forjada desde sus inicios en la cantera del Sevilla y pulida después en equipos como el Lebrijana, Ceuta, Huércal-Overa, Antoniano y Xerez. La nueva estrella del equipo ibicenco llega con hambre de éxito y no piensa en otra cosa que no sea subir de categoría.