diariodeibiza.es Un tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Balears ha rebajado de dos años a seis meses de prisión la condena impuesta a Silvio Manuel Cáceres, el portero paraguayo del Sant Josep que el 3 de mayo de 2009 lesionó de un portazo al árbitro del partido entre su equipo y el Sant Rafel después de una gran tangana.
La magistrada del Juzgado de lo Penal 1 de Ibiza condenó a 24 meses de prisión al que fuera dorsal número 1 del equipo josepí de Regional Preferente, por un delito de lesiones, en una sentencia firmada el pasado 25 de abril. La juez impuso al jugador el pago de las costas del proceso y de una imdenización de 1.510 euros para el trencilla: 760 por las lesiones y 750 euros por las secuelas.
La juzgadora consideró probado que después del partido Silvio propinó una patada a la puerta del vestuario, donde se habían refugiado el colegiado y sus jueces de línea, que impactó en la cara de Josep Roig, que entonces tenía 22 años. Después, le aplicaron cinco puntos de sutura y le quedó una cicariz en la frente, que la magistrada considera como «un perjuicio estético ligero en grado bajo».
Estiman el recurso de la defensa
La abogada defensora presentó un recurso de apelación, que ha sido estimado parcialmente por el tribunal de la Audiencia Provincial, formado por tres magistrados. «No encontramos datos objetivos que acrediten que la juez incurrió en error al valorar el resultado de la prueba practicada», explica el ponente en los fundamentos de derecho de la sentencia, hecha pública ayer.
Sin embargo, consideran como no acreditado que el procesado utilizase la puerta como un instrumento potencialmente peligroso. «Ni siquiera se ha citado si era de metal o de un simple tablero, si tenía cantos peligrosos o cristales…», se recoge en la sentencia, para justificar la rebaja de la condena. El condenado no ingresará en prisión, puesto que no tiene antecedentes penales y la pena es inferior a dos años.
El partido de la cuarta jornada de la Liga de Regional Preferente finalizó con la victoria por 0 a 1 del Sant Rafel. «Les pité cinco faltas, cinco tarjetas y la última fue de roja directa. Iban a por Julio, el jugador del Sant Rafel. Se formó una tangana y decidí pitar el final del partido», explicó al día siguiente, en una entrevista a Diario de Ibiza, el portero. Tras las expulsiones, el Sant Josep acabó con siete jugadores y el Sant Rafel con diez.
«Cuando llegamos a la caseta había mucha gente esperándonos, escupiéndome, tirándome botellas, pero pude pasar con la ayuda de la gente de Sant Rafel», explicó el trencilla. Silvió propinó una patada a la puerta de la caseta, que rebotó y golpeó en la frente de Josep Roig. «Si me llego a desmayar me matan a patadas», concluyó en la entrevista, cuando anunció que esa temporada no volvería a pitar más partidos.
Una mas del sant Josep. siempre lo mismo y hasta judicial acaban,
alguien los calienta y luego a pagar los jugadores.
ufff
seguir asi, va bien
menos follones en los campos de juego.
He de dir una cosa, aquet que ha quedat tant espantat. Aquesta noticia diria que esta una mica mal redactada i tampoc l’has llegit. Va passar ja alguns anys aquest fet, i es porter ja no és jugador del Sant Josep. Des d’aquest moment ha passat per la SD Portmany, per l’Ath. Jesús i el Ràpid a sa lliga preferent de sa temporada passada. Abans de xerrar un s’ha d’informar.
Salut i força
Si, amigo,si, pero en el momento de producirse los hechos jugaba en Sant Josep.
Despues ha jugado o jugara en cualquier equipo, pero esoes irrelevante.